Jean Paul Gaultier

Las cosas tienen una exacta medida. Un metro solo mide un metro y tal, pero no me refiero a eso. Creo que la palabra que buscaba es mesura (pero he dudado utilizarla porque me suena a sacarina)

El caso es que de repente me he dado cuenta de que ahora todo, absolutamente todo tiene una cantidad límite y eso antes no sucedía. Podía comerme paquetes enteros de Doritos Rock n’Cream de 7 en 7, igual que las pipas Facundo; beber kalimotxo con las decenas de litro como unidad métrica; tener solo la cara bronceada porque no me sacaban del agua ni con una Manifestación del Foro de la Familia Medusa-Piraña (de los Medusa-Piraña de toda la vida); jugar al Tetris hasta terminar las pilas del Game Boy; mandar mensajes sms que hicieron de Vodafone (en mis tiempos Airtel) la gran y próspera empresa que ahora es; fui capaz de hacer 3 veces lo que nosotros llamábamos “Ruta de la Antxoa” (el equivalente euskaldun de la obsoleta y famosa Ruta del Bacalao) y llegar a casa el domingo de madrugada, habiendo salido el jueves por la noche; y así hacía compulsivamente con infinidad de cosas…

Pero esos días llegaron a su fin. Y desde entonces encuentro un montón de cosas que se han convertido en cosas “Gaultier”. Cosas que me gustan, que me alucinan y que me ponen. Pero que tienen una línea de separación tan sutil con la saturación y el hastío que nunca se sabe cual es el momento límite. Es lo que me sucede con “Le Male” del susodicho Jean Paul. Hace que mis niveles de tiroxina y triyodotironina se disparen y, dependiendo de la cantidad en la que la perciba el morbo puede ser tan grande como la repulsión.

Tengo actores y actrices Gaultier, cd’s Gaultier, películas Gaultier, cantantes/grupos Gaultier, personas Gaultier, situaciones Gaultier, cosas Gaultier y por supuesto sitios Gaultier.

Hugh Grant es uno de los actores; está genial en “Love Actually” y en alguna otra (tipo Bridget Jones) siempre y cuando no sea protagonista. Tom Hanks es otro, que es mejor actor cuanto menos se esfuerza por conseguir un Oscar. Juliette Lewis sin duda es la actriz Gaultier por antonomasia: genial en “Asesinos Natos” y “Días Extraños”, insufrible en “El Cabo del Miedo” o “Kalifornia” (acaso no son el mismo papel?)
Björk es la mega cantante Gaultier y comparte podio con Anestesia, Sheryl Crow, Michael Jackson y Alanis (entre otros), ambos los 4 tienen joyas musicales y muchas, pero escuchar un disco entero de ellos es urticante (no quiero ni pensar en el efecto Medúlla o Invincible puede provocar canción tras canción en mi sistema nervioso).

Y ya. Me callo. Este no será un post Gaultier.