Una Tregua en mi Cabeza (Parte I)

Afortunadamente todo ha acabado. No sé como lo he conseguido pero he sobrevivido a la Pasarela Gaudí enterita… bueno, las malas lenguas dicen que lo he hecho a base de Moët y Biotherm (para las ojeras). De hecho ahora que lo pienso, no ha acabado; queda Circuit (la "alternativa") pero es que no doy más de mí.

Una vez te pones el mundo por montera te da lo mismo a quién te echen por delante, y así me ha lucido el pelo… así que después de un primer día estresante, me esperaban unos siguientes aún peores.

Para empezar no me pude despertar a tiempo de ver la 1ª colección de invierno de Victorio & Lucchino, y cuando llegué por la tarde ya me habían vuelto a quitar el asiento (te pierdes un desfile y te condenan al ostracismo).
Pero mientras Sandra (la chica de la organización) me odiaba sin cortarse, me invitaron (la chica increíble de La Vanguardia, que nunca me acuerdo de su nombre) al Front Row para ver la colección de Josep Abril…Me flipa este tío, la ropa es increíble, su tienda es brutal y él… bueno, mejor no hablamos de él que hay ropa tendida…

Total que desde ahí vimos a la Ministra de Cultura (Carmen Calvo, no?) rodeado de toda la plana mayor del politiqueo social catalano-barcelonés, que había venido a ver a Mireya Ruiz. Y alucinamos con Lydia Delgado y sobre todo con Hannibal Laguna (viejo conocido del priveé de Discothèque).

El miercolés, justo antes del desfile de Agatha Ruiz de la Prada, me enteré por Erik P. que la que me había incrustado el tacón la tarde anterior mientras se atusaba la melena era la hija de la Martínez-Bordiú, Cynthia no-sé-qué (a saber quién es el padre). Y entre que todavía me dolía el pie y pensar que es la tataranieta de Franco, me fastidió el desayuno.

(Continuará...)