De Dioses y de Reinas

Hace un par de meses el dependiente del FNAC se quedó mirando mis compras con cara de guasa; y yo no entendí nada. Como últimamente estoy un poco suspicaz en el tema camareros barra dependientes barra azafatas barra el resto de mindunguis con aires de grandeza, le pregunté a ver qué le hacía gracia. Y me respondió (muy educado a la par que alegre y pizpireto) que nunca había visto a nadie comprar a la vez tres cosas tan dispares conectadas entre sí.
Entonces me fijé por primera vez; junto a los rayos del detector de códigos de barras reposaban dos dvd’s y un libro. Cada uno en su plástico, y Dios en el de todos: Ciudad de Dios (la peli), En las Manos de Dios (el pseudo-documental bodrio de película, pero genial videoclip) y The God of the Small Things (para regalárselo a Sito).
Miré con cara de guasa mis compras y me tragué mis palabras.

El lunes nadé un par de horas por la tarde y, por si no estaba bastante cansado, como hacía buena tarde/noche me fui a dar una vuelta. Terminé (no sé muy bien cómo) tirando piedras al mediterráneo en una estampa muy bucólica y que haciendo repaso mental me da bastante vergüenza. De vuelta a casa paré en los Icaria porque La Reina me llamó. Y me fui a verla en flema británica original. Me gusta lo que hace Frears; Helen Mirren y James Cromwell están sublimes. Intuyo que serían mejores Reina (y Rey consorte) que los originales, pero la película es un poco telefilme de Antena 3 y muy monarquico-conservador. Yo que soy bastante de Lady Di, me creo esa película exactamente igual que la teoría de Acebes sobre el 11-M. Aun así me entretuvo, que no es poco.
El miércoles se encargaron de que tuviese un día asqueroso tirando a horrible, así que mientras me montaba en el coche apagué el móvil y con un cabreo personal contra el mundo en general terminé cortándole la cabeza a Maria Antonieta. Sin compasión. La banda sonora me gustó y visualmente es bastante marica, digo... espectacular. Pero quitando el momento las-reinas-tambien-lloran de Kirsten Dunst, toda la película es como un anuncio de Timotei muy largo. Me entretuvo e hizo que saliera de mejor humor, que no es poco.

El sábado llegó BrasilII para pasar apenas un par de días, eso sí; lo más opulentos posibles. El pobre no sabe (ni puede saber) que ha despertado todos los fantasmas de Selby. Corrijo; todos los fantasmas malos de Selby. Los que hicieron que pusiese mis granos de arena para contribuir a que la historia se fuese a tomar viento fresco. Con la visita de Derrick (yo a él) de esta semana y la visita de Matt (él a mí) de la siguiente, dudo que BrasilII y yo nos volvamos a ver. Pero lo bueno si breve… ya se sabe.